Ruta de 10 días por los Balcanes

Quisiéramos empezar este Post de Invitado agradeciendo mil y una veces a Miguel, nuestro anfitrión en Travelsauro. Él nos ha abierto las puertas de su blog, y qué mínimo que empezar agradeciendo tanto los consejos como la motivación que reparte en la web.

Para presentarnos, nosotros somos Let y Pablo, Pablo y Let, al frente de un proyecto llamado APRENDIZAJE VIAJERO. En él, redactamos historias, recomendaciones, y anécdotas de los viajes que realizamos de manera insaciable. Hoy, venimos a Travelsauro para hablar sobre una de las rutas más espectaculares que se pueden hacer en Europa, hablamos de una ruta por los Balcanes en 10 días.

En esta ruta visitamos Albania, Montenegro y Bosnia. Fue una auténtica aventura, os lo prometemos. Hoy nos centraremos sobre todo en la parte de Montenegro, cómo llegamos y por dónde cruzamos para visitar uno de los puntos más interesantes de Europa: El cañón Durmitor.

CÓMO LLEGAR A LOS BALCANES (EN AVIÓN)

Una de las entradas más famosas es por Dubrovnik (Croacia). Nosotros encontramos la forma de hacerlo al revés, volando a Tirana (Albania) gracias a unos vuelos baratísimos que encontramos online. Queremos aprovechar para comentar que es muy importante saber cuál es el mejor día para reservar vuelos, ya que dependiendo tanto del día de la semana como de la antelación, puedes encontrar variaciones de hasta el 15%.

Nosotros nos fuimos por 60€ aproximadamente gracias a una de las premisas del artículo: NUNCA reservar vuelos un sábado. En serio.

ALBANIA

Tirana

Tirana es una ciudad (por así llamarlo) distinta. Está en Europa, pero cuando paseas las calles no parece que estés en el viejo continente. La gente, eso sí, es amabilísima, y están dispuestos a ayudarte en cualquier situación. Dispuestos sí, otra cosa es que os entendáis (el inglés es a veces una quimera).

Se come genial y muy barato. Aprovechadlo. Eso sí, las infraestructuras sufren. Lo notaréis cuando queráis salir de la ciudad y buscar transporte. Esto es porque (a día de hoy) no hay estación de trenes, ni de autobuses, ni nada. Por no haber, ¡no hay ni McDonalds! (es la única capital europea que no tiene los grandes arcos dorados, lo cual nos alegró y nos hizo sentir algo más exóticos).

Nos dijeron que detrás de un centro comercial estaban parando varios autobuses de agencias que te llevaban a Montenegro en 5 o 6 horas. Decidimos dar el sí y continuar por tierra a manos de un conductor de minibús adicto a la música tradicional albana (y bien alta, para que entráramos en la cultura rápidamente).

MONTENEGRO

Budva

La siguiente parte de la ruta por los Balcanes fue por Montenegro. Allí paramos en Budva, donde está el archiconocido Sveti Stefan (una islita muy «instagram» de imposible acceso, ya que pertenece a un hotel de cinco estrellas que ningún mochilero en su sano juicio se podría permitir).

En Budva alquilamos un coche, y decidimos entrar al interior de los Balcanes, queríamos conocer el corazón de esta tierra, y perdernos en las rutas alternativas (que normalmente son lejos de la costa). Pero no sin antes hacer escala en Kotor, el «mini-Dubrovnik montenegrino».

Kotor

Kotor es turismo, y aguantamos medio día allí. Aún así, merece la pena ver la fortaleza, y la bahía entera. Subir los escalones para apreciar las vistas, no tiene precio. Bueno, literalmente sí, a veces se ponen unos chicos en el inicio de las escaleras cobrando 3€ o así. (Por supuesto, ilegalmente, pero avisados quedáis).

Desde Kotor tenéis excursiones a un pueblo a tan sólo diez minutos, llamado Perast. Allí, podréis comer al borde del mar por 5€, y disfrutar de las vistas ES-PEC-TA-CU-LA-RES de las dos islas con sus iglesias en el centro. Por esa misma cantidad, encontraréis «lancheros» que os cruzan en barquita. Sostened bien vuestras cámaras y aseguraos de llevar las baterías cargadas.

Parque Nacional Durmitor y el Cañon más profundo de Europa

Nos fuimos adentrando poco a poco en la parte que más nos interesaba, el Montenegro profundo. En esta ruta por los Balcanes es obligatorio llegar al Parque Nacional Durmitor. Necesitaréis mucha paciencia, ya que la carretera nos brinda más de 400kms de curva tras curva. Montenegro es un país muy montañoso, por lo que el peligro (o la aventura, como quieras llamarlo) está por todas partes.

Siguiendo por la M18/E762 encontraréis el Parque Nacional Durmitor, donde se encuentra el cañón natural más profundo de Europa con casi 2kms de altura. Bordear las montañas acompañando el río Piva hasta la frontera con Bosnia es una aventura espectacular. Tienes que cruzar más de 18 túneles (por llamarlo así, porque en realidad con cuevas con entrada y salida, sin ventilación ni iluminación ni nada de nada).

Por toda esta zona se puede hacer rafting, o incluso cruzar una de las tirolinas más largas del continente. Si buscas adrenalina, piensa en hacer este viaje.

BOSNIA

Cruzamos a Bosnia y sus bosques frondosos no sin antes pararnos en Scepan Polje, una de las fronteras más peligrosas de Europa. Es difícil llegar hasta allí en coche (a nosotros encima nos cayó una lluvia torrencial) y los guardas fronterizos de la república de Srpska no acompañaron en la bienvenida.

República de Srpska

¿Pero no era Bosnia? Sí, pero debemos recordar al lector que Bosnia está fragmentado políticamente, sentimentalmente, territorialmente, y de cada mente posible. Hay que recordar que el país sufrió una de las guerras más sangrientas de la Europa moderna desde 1992 hasta 1995. Como consecuencia, el 49% del país se lo quedó la república de Srpska, es decir, la parte serbo-ortodoxa. Cuentan con su propio cuerpo de policía, su propio sistema de Correos y su propio alfabeto (cirílico).

En la frontera nos despedimos del guarda. Llevábamos un rato bajo la lluvia buscando todos los papeles posibles que nos podían pedir. Nos despedimos de él, y también de un asfalto que íbamos a echar mucho de menos.

Sarajevo

El camino fue más complicado hacia Sarajevo. Mentalmente, sobre todo. Veías pueblos derruidos por la guerra y marcas de metralla en las paredes. Se podía respirar el dolor de un pueblo que hasta apenas unos años se estaba desangrando.

Sarajevo es una ciudad tremenda, quizás una de las más espectaculares que hayamos visitado Let y yo con APRENDIZAJE VIAJERO.

Siempre la recomendamos y hoy, hablando de nuestro itinerario por los Balcanes, la tenemos que mencionar.

Sin embargo, dejamos para otro post nuestros consejos sobre qué ver en Sarajevo, puesto que Bosnia da para mucho más. Nos quedaríamos a vivir ahí si pudiéramos. De hecho, cuando volvamos de Latinoamérica quizás demos el salto.

 

– Un artículo escrito por Pablo y Leti de Aprendizaje Viajero – 

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